Nuestro Viaje Escudriñando Las Escrituras

2018, May 11    

Gilberto

Los últimos cuatro años de mi caminar en Cristo han sido muy especiales e interesantes, los he dedicado a ser sacerdote de mi hogar exclusivamente. My esposa le entregó su corazón al Señor de forma muy particular hace cuatro años, y rápidamente comencé a enseñar. En el proceso comprendí que enseñar la palabra es como cuidar la hortaliza, hay que sembrar, desyerbar, regar con agua, esperar que la naturaleza haga su trabajo, y luego recoger el fruto. El cambio del corazón es un proceso y no algo instantáneo. En el trayecto, ambos hemos crecido, he aprendido tanto como ella. Interesantemente, he corregido mi postura en enseñanzas que estaban equivocadas o que mi entendimiento no era el mas claro. No es que he cambiado la sana doctrina, pero cuando se escudriña la palabra, el Espíritu Santo te enseña, te hablan al corazón, y te cambian la vida. Palabras quedan cortas para explicar lo que me ha pasado en estos cuatro años, pero hoy puedo decir que he crecido como creyente. Todavía tengo mucho que andar, es un viaje largo y sin regreso, y la trayectoria es hacia el cielo.

Después de algún tiempo compartiendo la biblia con mi esposa, nos embarcamos en un viaje sin darnos cuenta, y ese viaje es el viaje profético. Personalmente no he sido un creyente de estudiar mucho el aspecto profético, pero para poder contestar las preguntas que Sandra me hacía, me vi forzado a estudiarlo. El interés por el tema profético fué creciendo con el tiempo y hoy me siento más cómodo con todo lo que he aprendido. Una de las razones por la cual el tema profético no me gustaba, es porque es de múltiple interpretación. Múltiples enseñanzas sobre el levantamiento de la iglesia, que si pre tribulación o pos tribulación, realmente el tema confunde a cualquier estudiante. Pero durante mi búsqueda de recursos para estudiar el tema, encontré a un maestro que lleva enseñando profecía bíblica por casi cincuenta años, su nombre es el Dr. Irvin Baxter. Lo más que me gusto de su enseñanza es que él no utiliza otro recurso que no sea la biblia. Él testifica que en su juventud, dejó de leer libros de otros maestros proféticos porque descubrió que ninguno de ellos se ponían de acuerdo y decidió estudiar exclusivamente la biblia. Sus enseñanzas han sido de gran bendición para mí y mi esposa.

Sandra y yo queremos compartir por el medio the “blogs” lo que hemos aprendido y lo bueno que el Señor ha sido con nosotros. Yo llevo sobre diez años viviendo en los Estados Unidos y he crecido mucho como cristiano en mi estadía en este país. Todo lo que he aprendido quiero compartirlo esperando que sea de bendición para alguien que pueda leerlo en cualquier parte del mundo.

Sandra

Hola, me llamo Sandra, y como mi esposo ya les mencionó, nuestro viaje juntos comenzó hace 4 años. Nací y crecí siendo Católica y me eduqué en instituciones educativas Católicas. Seguía todas las fiestas que representan el Catolicísmo, conocía a Dios y sabia que Jesús había sido crucificado en la cruz hace mas de dos mil años, pero sentía en mi corazón que la doctrina que se me enseñaba era incorrecta y el rompecabezas nunca encajaba. Siempre tuve una voz dentro de mi diciéndome que esto o aquello no era correcto, y aunque esa voz siempre estuvo presente, yo la ignoraba porque me gustaba vivir haciendo lo que yo quisiera sin tener que rendirle cuentas a nadie.

Asi es que funciona la religión Católica, tu pecas y simplemente vas a confesarte ante un sacerdote, pagas una penitencia y ya! estás perdonado…. pero que equivocada estaba. Esa voz incansable dentro de mí era el Espíritu Santo tratando de convencerme, enamorándome, atrayéndome con cuerdas de amor para que regresara a donde pertenezco. Creo indudablemente que Dios me escogió desde antes que yo naciera para ser una de sus hijas, inclusive sin yo saberlo. Un dia me rendí, en mi lecho de enfermedad, me rendí ante Él, le di mi corazón y mi vida a Jesús. Solo quería que Él tomara las riendas de lo poco o lo mucho que me quedaba de vida. Yo no sabia lo que implicaba esta promesa de mi parte, este convenio, pero obedeciendo esta vez, tomé el paso de fé.

Cuatro años mas tarde les puedo decir que no he vuelto atrás, mi vida cambió totalmente, Jesús es mi Rey, mi Salvador, y mi todo. Sin saberlo, el dia que decidí entregarme por completo a Jesucristo y hacerlo mi Señor, solo llegaron bendiciones y mas bendiciones. Regrese con vida de nuevo a mi casa en los Estados unidos, y unas semanas mas tarde conocí al hombre mas maravilloso que pude haber conocido en mi vida, mi esposo, mi mentor. Dios lo puso en mi camino para que el viaje que emprendí primero sola, no se desviara o tomara otro rumbo. El primer paso que tomé en mi vida Cristiana fue bautizarme en las aguas, allí renací y soy una persona nueva, perdonada de mis pecados. Allí fue donde comenzó el viaje del cual no pensamos regresar. Ha sido un proceso lento para comenzar a entender la palabra de Dios, pero sigo aprendiendo dia a dia y es un camino que no quiero abandonar. Quiero ser la persona que Dios planeó que yo fuera desde que me creó. No pretendo decir que tengo mucho conocimiento, pero quiero compartir con ustedes lo que he aprendido a lo largo de estos años. Quiero compartir el amor de Jesús con todos los que leen y quiero decirles que nunca es tarde para regresar al rebaño, para regresar a donde pertenecemos. Ahora quiero obedecer el mandato de la gran comisión que Jesucristo nos encomendó, y es el de hacer discípulos por todas las naciones y recordarle a todos la promesa de que Él estará con nosotros hasta el fin del mundo. (Mateo 28:20)